El cuidado de salud es un derecho humano fundamental

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El cuidado de salud es un derecho humano fundamental—y nosotros luchamos por los derechos humanos fundamentales. Elizabeth no dejará de luchar hasta que todos tengan cobertura de salud y hasta que nadie se quede en bancarrota por tener que pagar facturas médicas o surtir sus medicamentos. Añade tu nombre si estás de acuerdo: Necesitamos Medicare para todos.

Este plan fue publicado originalmente como parte de la campaña presidencial de la senadora Elizabeth Warren.

Cuando Elizabeth estaba en la escuela intermedia, su padre sufrió un ataque al corazón. El se quedó sin trabajo por mucho tiempo, y las facturas se acumularon. Perdieron su camioneta familiar, y estuvieron a punto de perder su casa también. 

Años después, como profesora de derecho concursal, Elizabeth investigó las razones por las cuales las familias trabajadoras se estaban quedando en la ruina. Sus investigaciones revelaron que la mayoría de las personas que se declaraban en bancarrota, tenían mucho en común con su familia—la mayoría eran de clase media, y aproximadamente la mitad se habían declarado en bancarrota después de un problema médico serio. Lo más irónico y sorprendente de todo esto: tres cuartos de estas personas tenían cobertura médica, pero no les fue suficiente. 

El “Affordable Care Act”  hizo grandes avances en la expansión del acceso al seguro médico, y debemos defender los programas como Medicaid y el “Affordable Care Act” contra los intentos republicanos de arrebatar el cuidado médico de las personas. Pero además es tiempo de que tomemos el paso siguiente. 

Elizabeth apoya Medicare para todos, que proveería a todos los estadounidenses con un programa de cuidado de salud público. Medicare para todos es la mejor manera de darle a cada persona en este país la garantía de cuidado médico de alta calidad. Todos tendrán cobertura. Nadie se irá a la ruina por culpa de una factura médica. No habrá más pleitos con las compañías de seguro médico. 

El modelo de negocio de una compañía de seguro médico es recibir la mayor cantidad de dinero posible en las primas y pagar lo menos posible en la cobertura médica de sus clientes. 

Eso deja a las familias con primas elevadas, deducibles altos y pleitos interminables con las compañías de seguros para tratar de obtener la atención médica que sus doctores le recomiendan a ellos y a sus hijos como parte de su tratamiento. 

Las aseguradoras, enfocadas en proteger sus propios intereses, restringen sus redes de proveedores y se interponen en el camino cuando quieres ver a tu médico o cuando necesitas ver a un especialista sin incurrir en gastos exorbitantes. 

Medicare para todos soluciona todos estos problemas. Todos pueden ir al médico que necesiten. Nadie se va a la ruina. Y Medicare le pagará a tu doctor en vez de que tengas que lidiar con tu aseguradora.

Cada estadounidense debería poder recibir la atención médica que necesita, cuando la necesita. Vale la pena luchar por ello, y Elizabeth está en esta lucha a largo plazo. Es por eso que Elizabeth luchará por Medicare para todos.

Reducir el costo de los medicamentos recetados

Los precios de los medicamentos están abrumando a las familias. Millones de estadounidenses están omitiendo las dosis requeridas y están poniendo en riesgo su salud porque no pueden darse el lujo de surtir sus recetas. Los pacientes y los programas de salud pública están pagando tasas exorbitantes, y necesitan un alivio.

La Ley de Fabricación de Medicamentos Asequibles de Elizabeth permitiría al Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS, por sus siglas en inglés) intervenir donde el mercado ha fallado. HHS fabricaría medicamentos genéricos en los siguientes casos: si ninguna compañía está fabricando un medicamento, cuando solo una o dos compañías fabrican un medicamento y su precio ha subido drásticamente, cuando el medicamento está en escasez, o cuando un medicamento designado como esencial por la Organización Mundial de la Salud enfrenta competencia limitada y precios altos.

Podemos hacer más para bajar los altos precios de los medicamentos. Medicare debe negociar agresivamente con las compañías farmacéuticas. Deberíamos tomar medidas enérgicas contra el abuso desenfrenado del sistema de patentes y regulación. Y deberíamos importar medicamentos de países que venden los mismos medicamentos y que cumplen con estándares estrictos de seguridad, pero que cobran a sus ciudadanos una fracción de nuestros costos.

Salud mental

Además del derecho al cuidado de la salud física, debemos priorizar los servicios de salud mental que sean económicos  y de alta calidad. A pesar de la gran necesidad de estos servicios, a muchos estadounidenses se les niega la cobertura. La Ley de Transparencia de la Cobertura de Salud del Comportamiento de Elizabeth haría que las aseguradoras se hagan responsables de proporcionar beneficios adecuados de salud mental y garantizaría que los estadounidenses reciban las protecciones que están garantizadas por ley. Ella también ha trabajado para que que el Departamento de Salud y Servicios Humanos sea responsable de mejorar el cumplimiento de las aseguradoras con las leyes de paridad de salud mental a través de un portal para consumidores en línea.

Luchemos contra la crisis de los opioides

La epidemia de los opioides es una emergencia de salud pública. En el 2017, la expectativa de vida en los Estados Unidos disminuyó por tercer año consecutivo, en gran parte debido a las muertes causadas por sobredosis de drogas.

Esta no es la primera vez que nuestro país se enfrenta a una crisis nacional de salud pública de gran magnitud. Cuando las muertes por VIH/SIDA crecieron rápidamente en la década de los 80, el sistema médico de nuestro país no estaba equipado para responder. Luego, en 1990, el Congreso aprobó el “Ryan White CARE Act”, que finalmente proporcionó fondos significativos para ayudar a los gobiernos estatales y locales a combatir la creciente epidemia. Necesitamos un esfuerzo similar para enfrentar la epidemia de opioides hoy.

La nueva Ley “CARE” de Elizabeth, y el representante Elijah Cummings, invertiría $100 mil millones en fondos federales durante los próximos diez años en estados y  comunidades locales para combatir esta crisis — porque eso es lo que se necesita para asegurarse de que cada persona reciba el tratamiento que necesita. Los fondos irían directamente a los socorristas, los departamentos de salud pública y las comunidades más afectadas por esta crisis, para que tengan los recursos para proporcionar servicios de prevención, tratamiento y recuperación a quienes más lo necesitan.

También ayudará a fortalecer nuestra infraestructura de tratamiento de adicciones— los estados más afectados actualmente usan Medicaid hasta sus últimas limitaciones para enfrentar la crisis, ampliar el acceso al tratamiento asistido por medicamentos y evitar que los programas de tratamiento y las residencias de recuperación cumplan con los altos riesgos. Y el plan de Elizabeth ayudará a responsabilizar a los fabricantes de medicamentos por el impulso de las drogas poderosas y adictivas que han contribuido a esta epidemia.

Proteger el acceso al cuidado de salud en comunidades rurales

En todo el país, las barreras a la cobertura, la desaparición de hospitales y centros de salud, y la escasez de profesionales de la salud están negando a las comunidades rurales la atención médica de alta calidad que merecen.

Con Medicare para todos, habrá acceso a la atención primaria y precios más bajos para los pacientes— y también,  menos atención no compensada para los hospitales rurales, lo que los ayudará a mantenerse a flote. Elizabeth creará una nueva designación de Medicare para hospitales rurales que los reembolse a una tasa más alta y que ofrecerá flexibilidad de servicios para satisfacer las necesidades de sus comunidades. Elizabeth también fortalecerá las protecciones antimonopolio para combatir las fusiones de hospitales que aumentan los costos, reducen la calidad y cierran las instalaciones rurales.

El plan de Elizabeth aumentará los fondos para los Centros de Salud Comunitarios en un 15 por ciento anual durante cinco años y establecerá un fondo de capital de $25 mil millones de dólares para respaldar varias opciones para mejorar el acceso al cuidado médico en áreas de escasez de profesionales de la salud. Crecerá la fuerza laboral médica actual en las comunidades rurales al aumentar el límite de las ubicaciones de residencias médicas, enfocadas en áreas desatendidas, por 15,000 en los próximos cinco años. Además aumentará los programas de reembolso de préstamos del Cuerpo Nacional de Servicios de Salud y del Servicio de Salud Indígena, a reembolso total de préstamos. Y su plan invertirá en la futura fuerza laboral de salud ampliando drásticamente los programas de aprendizaje entre sindicatos, escuelas secundarias, colegios comunitarios y una amplia gama de profesionales de la salud para crear una fuerza laboral de atención médica que esté arraigada en la comunidad.